El pádel es un deporte que se juega principalmente en parejas y se desarrolla en una pista cerrada. A continuación, se describen algunos aspectos importantes de la dinámica de juego:
El objetivo principal del pádel es marcar puntos haciendo que la pelota rebote en el campo contrario sin que el equipo oponente pueda devolverla correctamente.
El juego comienza con el saque, que debe realizarse desde detrás de la línea de saque y dirigirse al campo diagonal opuesto. Una vez realizado el saque, los jugadores deben golpear la pelota alternativamente, permitiendo que rebote una vez en su propio campo antes de ser golpeada.
La puntuación se cuenta en números enteros y se realiza de manera similar al tenis. Un partido de pádel se juega a un determinado número de juegos, y cada juego se divide en puntos. Para ganar un juego, un equipo debe llegar a 4 puntos y tener al menos dos puntos de ventaja sobre el equipo oponente. Si ambos equipos llegan a 3 puntos, se llama "iguales" o "empate", y el siguiente punto se llama "ventaja". Si el equipo que tiene ventaja gana el siguiente punto, ganan el juego; si el equipo que tiene ventaja pierde el punto, la puntuación vuelve a "iguales".